Aquí Te
presento siete maneras seguras de
destruir a los hijos:
1. No molestarse con la gestión de la casa. Por el contrario, deje eso a su
esposa. Eso sería bastante bien asegurar una atmósfera estridente como ella
lleva la carga emocional de dirigir la casa. No deje que confíe en usted como
respaldo en la disciplina o en establecer un tono positivo. Con el tiempo su
hijos se arruinará y crecerá resentido, pero usted será libre de continuar un
estilo de vida adolescente de auto-indulgencia a través de sus años de adultos.
Sin embargo la Biblia nos aconseja de cómo administrar bien nuestra casa: Debe dirigir bien a su
propia familia, y que sus hijos lo respeten y lo obedezcan. 1
Timoteo 3:4-5. Nueva Traducción Viviente (NTV)
2. No se moleste en animar a sus hijos. Cuando el niño recibe una
"B" en su boleta de calificaciones,no lo ánima, sino que le exige;
Cuando tu hijo salga en su deporte favorito, y usted sabe que él podía haberlo hecho mejor (a usted no le importa
el esfuerzo de sus hijos).
La Biblia
nos dice cómo debemos hacerlo mejor" Padres, no hagan enojar a sus hijos
con la forma en que los tratan. Más bien, críenlos con la disciplina, amor e
instrucción que proviene del Señor.” (Efesios 6: 4a) ( Génesis 31:14, 15, 1 Samuel
20: 30-34, Colosenses 3:21)
3. Elija no involucrarse personalmente en sus vidas. Es decir, dar directivas. Sea el
jefe. Mantenga su distancia emocionalmente. Nunca digas: "Lo siento".
Permanezca en la oficina más tiempo, y pierda sus juegos de pelota y
conciertos. Traiga su trabajo a casa con usted. No te molestes en meterlos en
la noche o contarles historias. Sea un perfeccionista. Los regaña cuando
derraman su leche. Ser escasa en la entrega de afirmación o elogios.
La Biblia nos guía cómo hacerlo bien: Saben que tratamos a cada uno como un padre trata a sus propios hijos. Les
rogamos, los alentamos y les insistimos que lleven una vida que Dios considere
digna. Pues él los llamó para que tengan parte en su reino y gloria. (1
Tesalonicenses 2: 11b, 12b) (Ver Mateo 7: 9, 10)
4. No se preocupe por modelar los valores que dice
abrazar. Ignore el hecho de que sus hijos
necesitan desesperadamente un papá que sea genuinamente auténtico.
La Biblia te señala la mejor forma de hacerlo:"Tendré
cuidado de llevar una vida intachable ... Caminaré en mi hogar con corazón de
integridad". (Salmo 101: 2a, c)
5. Absolverse de la responsabilidad de instruir a
sus hijos en asuntos espirituales. Déjelo a su esposa o a la iglesia. Eso garantizará el hecho de que los
chicos consideren el cristianismo como una proposición débil. Tus hijas, con
toda probabilidad buscarán hombres como su padre: espiritualmente insípido.
La Biblia nos dice: "Los padres ... educan ellos mismos a sus hijos en el entrenamiento y
la instrucción del Señor". (Efesios 6: 4a, c)
6. Desarrolle un estándar de control y
perfeccionismo, desconfié y no se comunique mucho con sus hijos.
"(El Amor)
siempre protege, siempre confía, siempre espera, siempre persevera". (1
Corintios 13: 7)
7. Criticar y socavar a su esposa, especialmente delante
de los niños. Nunca
demostrar afecto hacia ella en presencia
de ellos. Permita que los niños sean una
palanca entre los dos, usted siempre gane ante ellos, discuta con su esposa y
no le dé la razón cuando la tiene, permita que sus hijos los dividan y vaya
siempre en favor de ellos. Discutir mucho, y asegúrese siempre de
"ganar".
Este es un
error fatal La Biblia nos aconseja así:
"Maridos ... sean considerados con sus
esposas, y trátenla con respeto, amor, dignidad ... y no sean duros con
ellos". (1 Pedro 3: 7a, c, Colosenses 3: 19b) (Eclesiastés 9: 9,
Proverbios 5:18, 19, Efesios 5:25, 28, 29)
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