'El que
tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré
del maná escondido y le daré una piedrecita blanca, y grabado en la piedrecita
un nombre nuevo, el cual nadie conoce sino aquel que lo recibe.'"(Apocalipsis 2:17
LBLA)
El maná
escondido
Maná, por
supuesto, es lo que alimentó a los israelitas desde el cielo durante 40 años.
Así que cualquiera cosa que sea, podemos considerar que es comida (al menos
espiritualmente) y del cielo. Pero está oculto. El único maná que siempre estuvo "oculto" fue el que Moisés
había colocado en el Arca de la Alianza. Sólo el Sumo Sacerdote habría visto
ese maná. Es bueno decir que esto representa nuestra nueva relación como sacerdotes
para Dios.
Una cosa es
cierta: se destaca en contraste con el alimento por el que fueron condenados,
la carne sacrificada a los ídolos.
La piedra blanca
El blanco,
por supuesto, es el color de la pureza. Hace un contraste inmediato con la
inmoralidad sexual que los inquietaba tanto. Pero, podemos ver también en él el
Urim del Sumo Sacerdote del Antiguo Testamento. Urim, significa "luz", el Urim transmitía la decisión de Dios al Sumo Sacerdote. El
Sacerdote llevaba esta piedra en su pectoral.
El nuevo nombre
Este es un
concepto que se repetirá en Apocalipsis. Evidentemente, en el momento del regreso del Señor aprenderemos algo nuevo
acerca de nuestro Señor Jesucristo, algo sobre un nuevo nombre. Conocer el
nombre de mascota de alguien es un signo de estrecha relación personal; Es probable
que cuando Él regrese esa relación será mucho más cercana.
Lecciones para nosotros
La marca del
vencedor es ésta: El vencedor se guarda de las cosas de este mundo, y más bien
se convierte en oración viva y privada a Dios. Se abstiene de la inmoralidad
sexual, manteniéndose puro. Él estima en gran manera su estrecha y personal
relación con el Señor Jesús.
Ese es el objetivo: no mundanalidad, no inmoralidad,
sólo la relación con Jesús. ¿Cómo es tu objetivo? ¿Qué objetivos tienes?
¿Tienes una relación de amistad santa con Cristo?
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