Tu Herencia

La Parte de Herencia que te pertenece.

Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir por heredad; y salió sin saber dónde iba. Hebreos  11:8.

Abraham se le prometió una heredad, la cual el salió a buscarla. Ya Dios ha elegido nuestra heredad, ya tenemos nuestra parte con Dios.

Él nos elegirá nuestras heredades; La hermosura de Jacob, al cual amó. (Selah.) Salmos 47:4.

Es una "Tierra de la cual Jehová tu Dios cuida: siempre están sobre ella los ojos de Jehová tu Dios, desde el principio del año hasta el fin de él."  Deuteronomio 11:12.

Dios dijo: "...¿Cómo te pondré por hijos, y te daré la tierra deseable, la rica heredad de los ejércitos de las gentes? Y dije: Padre mío me llamarás, y no te apartarás de en pos de mí. Jeremías 3:19.

El Señor nos sacará de la esclavitud y nos llevará a nuestra heredad.

Dios llevo a la descendencia de Abraham a una tierra que fluye leche y miel, Así tiene preparada una heredad para nosotros, una tierra nueva y de paz.

Y diles: Así ha dicho el Señor Jehová: El día que escogí a Israel, y que alcé mi mano por la simiente de la casa de Jacob, y que fui conocido de ellos en la tierra de Egipto, cuando alcé mi mano a ellos, diciendo: Yo soy Jehová vuestro Dios;  Aquel día que les alcé mi mano, que los sacaría de la tierra de Egipto a la tierra que les había proveído, que fluye leche y miel, la cual es la más hermosa de todas las tierras; Ezequiel 20:5-6.

El Señor nos enseñará como llegar a esa tierra y nos guiará.

Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que andas. Isaías 48:17.

Así como Dios nos enseña nosotros nos convertimos en enseñadores para todos los que quieran encontrar el camino hacia la tierra de plenitud.

Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sión saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.  Isaías 2:3

Aunque en esta tierra tengamos aflicciones y pruebas, Dios no detendrá su enseñanza en nosotros.

Bien que os dará el Señor pan de congoja y agua de angustia, con todo, tus enseñadores nunca más te serán quitados, sino que tus ojos verán tus enseñadores.  Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda. Isaías 30:20-21.

Dios nos enseñará todas las cosas que necesitamos para entrar en esa tierra, prometida.

He aquí que Dios es excelso con su potencia; ¿Qué enseñador semejante a él? Job 36:22.

Para entrar a esta tierra se necesita tener fe, sin fe es imposible entrar.

Porque por fe andamos, no por vista. 2 Corintios  5:7

Esta tierra hay que buscarla con todas nuestras fuerzas.

Porque no tenemos aquí ciudad permanente, mas buscamos la por venir. Hebreos 13:14.

Esta tierra no compagina con los deseos y estilo de vida de los escogidos de Dios, por eso somos peregrinos en esta tierra y deseamos estar en la tierra que si va de acuerdo a nuestra esencia.

Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, 1 Peter 2:11

Levantaos, y andad, que no es ésta la holganza; porque está contaminada, se corrompió, y de grande corrupción. Miqueas 2:10.

Está heredad no es una tierra baldía y sin fruto, es un reino preparado desde antes de la fundación del mundo.

Entonces el Rey dirá a los que estarán a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Mateo 25:34.

Por eso debemos Alumbrar os ojos de nuestro entendimiento, para que saber sea la esperanza de su vocación, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos. (Efesios1:18)

 

Esta herencia es una herencia incorruptible que no puede contaminarse, ni marchitarse reservada en los cielos y va a ser manifestada en los últimos días.

Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos ha regenerado en esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,  Para una herencia incorruptible, y que no puede contaminarse, ni marchitarse, reservada en los cielos  Para nosotros que somos guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrimero tiempo. 1 Peter 1:3-5.

Es una herencia diferente a las herencias de este mundo que se corrompen o tienes que dejarla cuando mueres, esta herencia no se acaba nunca y siempre la tendrás contigo. Vale la pena afrontar todas las travesías del camino para alcanzar lo que Dios ha dispuesto para ti. Por eso debes luchar y aferrarte más a Dios y a lo que Dios te ha dado. Dios te bendiga.