Los hijos de Dios tienen parte de la herencia. Recibiremos
las bendiciones que Dios tiene para su pueblo. Dios nos dará todo lo que le ha
dado a Cristo. Reconocemos que también tenemos que sufrir con él para compartir
su gloria. Pero esos sufrimientos no son
nada comparados con toda la gloria que vamos a recibir después.
Y puesto que somos sus hijos, también tendremos parte en la
herencia que Dios nos ha prometido, la cual compartiremos con Cristo, puesto
que sufrimos con él para estar también con él en su gloria. (Romanos 8:17 DHH)
Y si están unidos a Cristo, entonces son miembros de la gran
familia de Abraham y tienen derecho a recibir las promesas que Dios le hizo. (Gal
3:29 BLS)
Como hemos sido bautizados en Cristo, de Cristo nos hemos revestido.
Entonces como estamos en Cristo, somos
del linaje de Abraham y si somos de Cristo, entonces somos descendencia de
Abraham, herederos según la promesa. (Gálatas 3:27-29 NBLH)
Miren lo grande que es el amor que el Padre nos ha mostrado,
¡hasta llega a hacer posible que seamos llamados hijos de Dios! Y eso es lo que
de verdad somos. Por eso la gente del mundo no nos conoce, pues el mundo no
conoce a Dios. (1Jn 3:1 PDT)
No somos esclavos ni de otra nacionalidad, sino que somos
hijos de Dios.
… y por ser hijo,
Dios te ha hecho su heredero. (Gálatas 4:7 PDT)
Eso era lo que él tenía planeado y le dio gusto hacerlo. Antes
de la creación del mundo, Dios decidió adoptarnos como hijos suyos a través de
Jesucristo. Efesios 1:5 PDT.
Nosotros fuimos otorgados a Cristo Jesús antes de la
fundación del mundo. Y Veremos la gloria del Señor.
Padre, aquellos que
me has dado, quiero que donde yo
estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la
fundación del mundo. Juan 17:24 RV60.
Para ver esta gloria hay que comportarse como hijos de Dios.
Si salimos victoriosos se nos dará poder sobre todas las naciones.
Sólo pórtense como lo han hecho, hasta que yo llegue. Al que
salga victorioso y siga haciendo hasta el final lo que yo pido, le daré poder
sobre todas las naciones. Revelaciones 2:25-26 PDT.
Para aquellos que venzan tendrán recompensas increíbles y
maravillosas.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las
iglesias. Al que venciere, daré a comer del árbol de la vida, el cual
está en medio del paraíso de Dios. Revelaciones 2:7
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las
iglesias. El que venciere, no recibirá daño de la muerte segunda. Revelaciones
2:11
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las
iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una
piedrecita blanca, y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, el cual ninguno
conoce sino aquel que lo recibe. Revelaciones 2:17.
El que venciere, será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su
nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y
delante de sus ángeles. Revelaciones 3:5 (RV1909)
Mas el que perseverare hasta el fin, éste será salvo. Mateo
24:13 (RV1909)
¿Quién es el que le
gana al mundo?
El que cree que Jesús es el Hijo de Dios. (1 Juan 5:5 PDT)
Los hijos de Dios son vencedores, pueden triunfar sobre las
circunstancias y problemas.
El amor del Padre sustenta a sus hijos y los cuida en toda
dificultad nadie puede apartar a estos que son sus hijos.
¿Podrá algo separarnos del amor de Cristo? Ni las dificultades, ni
los problemas, ni las persecuciones, ni el hambre, ni la desnudez, ni el
peligro ni tampoco la muerte. Así dicen las Escrituras: "Por ti estamos
siempre en peligro de muerte, nos tratan como si fuéramos ovejas que van al
matadero". Más bien, en todo esto salimos más que victoriosos por medio de Dios
quien nos amó. (Romanos 8:35-37 PDT)
¿Cómo saber quiénes
son hijos de Dios?
Son hijos de Dios
aquellos que creen en Jesucristo aman al Padre y aman a Jesucristo.
Todo aquel que cree
que Jesús es el Cristo, es nacido de
Dios; y todo aquel que ama al que
engendró, ama también al que ha sido
engendrado por él. (1Jn 5:1 RV60)
Son hijos de Dios aquellos que confiesan que Jesús es Hijo de
Dios.
Cualquiera que confesare que Jesús es el Hijo de Dios, Dios
está en él, y él en Dios. 1 Juan 4:15
En esto conoced el Espíritu de Dios: todo espíritu que
confiesa que Jesucristo es venido en carne es de Dios: 1 Juan 4:2
Son hijos de Dios aquellos
que guardan sus mandamientos
Y en esto sabemos que nosotros le hemos conocido, si
guardamos sus mandamientos. 1 Juan 2:3
Son hijos de Dios
aquellos que obedecen las enseñanzas de Cristo.
Luego Jesús empezó a decirles a los judíos que habían creído
en él: -Si ustedes siguen obedeciendo mi enseñanza, serán verdaderamente mis
seguidores. Conocerán la verdad, y la verdad los hará libres. (Juan 8:31-32
PDT)
Son hijos de Dios
aquellos que andan en luz y aman a su hermano
El que dice que está en luz, y aborrece a su hermano, el tal
aun está en tinieblas todavía. 1 John
2:9 (RV1909)
¿Quiénes no son hijos
de Dios?
Aquellos que están un tiempo con los hijos verdaderos de
Dios pero luego salen de entre ellos y apostatan de la fe.
Hijitos, ya es el último tiempo: y como vosotros habéis oído
que el anticristo ha de venir, así también al presente han comenzado a ser
muchos anticristos; por lo cual sabemos que es el último tiempo. Salieron de
nosotros, mas no eran de nosotros; porque si fueran de nosotros, hubieran
cierto permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que
todos no son de nosotros. 1 Juan 2:18-19
Lo que no son hijos de Dios no oye a los padres espirituales
en la iglesia.
Nosotros somos de Dios: el que conoce a Dios, nos oye: el
que no es de Dios, no nos oye. Por esto conocemos el espíritu de verdad y el
espíritu de error. 1 Juan 4:6
No son hijos de Dios aquellos que niegan que Jesús es el
Cristo y niega que el Padre es Dios.
¿Quién es mentiroso, sino el que niega que Jesús es el
Cristo? Este tal es anticristo, que niega al Padre y al Hijo. 1 John 2:22
No son hijos de Dios aquellos que dicen que le han conocido pero
no guardan los mandamientos de Dios.
El que dice, Yo le he conocido, y no guarda sus
mandamientos, el tal es mentiroso, y no hay verdad en él; 1 John 2:4
Los que desprecian a Dios sus mandamientos y corrección.
Los que no quieren seguir a Cristo Jesús ni sus mandamientos
esos son los perdedores.
Tú desprecias la inagotable bondad, tolerancia y paciencia de
Dios, sin darte cuenta de que es precisamente su bondad la que te está llevando
a convertirte a él. Pero tú, como eres terco y no has querido volverte a Dios, estás
amontonando castigo sobre ti mismo para el día del castigo, cuando Dios se
manifestará para dictar su justa sentencia y pagar a cada uno conforme a lo que
haya hecho. Dará vida eterna a quienes, buscando gloria, honor e inmortalidad,
perseveraron en hacer lo bueno; pero castigará con enojo a los rebeldes, es
decir, a los que están en contra de la verdad y a favor de la maldad. Habrá
sufrimiento y angustia para todos los que hacen lo malo, para los judíos en
primer lugar, pero también para los que no lo son. En cambio, Dios dará gloria,
honor y paz a todos los que hacen lo bueno, a los judíos en primer lugar, pero
también a los que no lo son. (Romanos 2:4-10 DHH)
Quieres ser un ganador, entonces debes buscar a Cristo Jesús
y aceptarle en tu vida como Señor verdadero.
Quieres ser ganador confiesa a Jesucristo, obedece su
palabra y amale con todo tu corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario