jueves, 16 de junio de 2016

Mala Fama y Pecados Graves



Génesis 18:16-21.

Entonces Jehová le dijo: - Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra aumenta más y más y su pecado se ha agrado en extremo.( Génesis 18:20)

En la Biblia en Génesis 18 se narra la conversación que Dios sostiene con Abraham, en dicha conversación Dios le revela a Abraham que iba a ejecutar juicio a Sodoma y Gomorra, entonces Abraham le pide a Dios que no destruya las ciudades, que si por lo menos había cincuenta justos, perdonara a la ciudad, Dios acepta, pero ante el hecho de que en esas ciudades no existía esa cantidad de justos Abraham sigue intercediendo reduciendo el número de justos, hasta llegar al número de diez personas justas, si se encontraban sólo diez personas justas en la ciudad Jehová no la destruiría, por amor a aquellos justos.


“El clamor en contra de Sodoma y Gomorra.”

Cuando se comete injusticias, pecados, maldades, en contra de la gente, se activa automáticamente un clamor por que se haga justicia, juicio y se pague por lo que se cometió. Los crímenes cometido, las injusticias, las abominaciones, los pecados, los maltratados, maldades todo lo que se hace en contra del ser humano tiene su castigo. Dios es un Dios de Justicia y nadie quedará impune, dice la Biblia, que no olvida el pecado y que visita la maldad de los Padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que le aborrecen. Todo crimen será castigado, el castigo de los crímenes puede pasar a otras  generaciones, a los hijos nietos, bisnietos. Si en una familia no se arrepienten y buscan a Dios será una familia marcada por el castigo de la maldad de los padres. Estoy hablando acerca de castigo por el pecado, no de enfermedades, que son para que la persona sea sana y vea la gloria de Dios. Cuando los discípulos le preguntaron a Jesús sobre un enfermo y le dijeron “que quien había pecado este o sus padres” Jesucristo les respondió que eso había sucedido para que se viese la gloria de Dios.

El llamado de Abraham fue un llamado a interceder, por los perdidos, Sodoma y Gomorra eran ciudades donde se practicaban perversidades, violaciones, homosexualismo, incestos, y otra serie de pecados, pero Abraham intercede por los homosexuales, los violadores, los criminales. Porque Dios busca un pueblo que interceda por los demás, para que estos tengan la oportunidad de arrepentirse y buscar a Dios. Dios había resulto juzgar a estas ciudades pero se lo revela a Abraham para que este interceda por aquellos que están sumidos en la oscuridad.

En estos tiempo cuando se manifiesta abiertamente la homosexualidad, el crimen, el aborto, el lesbianismo, el incesto, la promiscuidad y toda clase de pecados sexuales, debe existir un creyente que se levante a interceder por los perdidos y a buscar la misericordia de Dios por las ciudades. El juicio puede venir, porque cada sociedad en la historia de la humanidad que ha buscado los placeres de la carne, se han corrompido y sus valores morales se han perdido han encontrado el fin y la aniquilación. El ejemplo lo tenemos en Sodoma y Gomorra, el ejemplo lo tenemos en Pompeya, el ejemplo lo tenemos en los millones de muertos por el sida, en los diferentes paises del mundo.

Es un llamado de alerta máximo, no es ir en contra de los homosexuales, lesbianas y toda estas personas que practican estas cosas, es un llamado a interceder por ellos, para que sean iluminados por la luz de Cristo, para que sean, transformados por la presencia de Dios en sus vidas, para que sean renacidos de nuevo, ellos si tienen oportunidad de cambiar y ser salvos. Pero se necesitan creyentes que doblen sus rodillas e intercedan por estas personas. Ellos creen que están haciendo bien, ellos creen que están en lo correcto, ellos creen que pueden salvarse, pero hay un juicio en contra de ellos, que se activa automáticamente al practicar el pecado, la maldad y la injusticia. El creyente es el llamado a abrirles los ojos e interceder ante el trono de la gracia para que no venga la destrucción.

Las personas de Sodoma y Gomorra estaban tan corrompidas que quisieron acostarse con aquellos ángeles que Dios había enviado, los ángeles tuvieron que dejarlos ciegos para poder huir con Lot y su familia de la ciudad, Lot fue la única persona justa que se encontró en la ciudad, por lo tanto la ciudad fue destruida.

Los justos pueden salvar la ciudad.

Cuando se multiplica la justicia, hay más personas practicando lo bueno y obedeciendo al Señor, una ciudad puede gozar del favor de Dios y se puede salvar. La influencia de aquellos que son justos debe ser mayor sobre la sociedad, para y traer salvación y bienestar. Cuando la oscuridad arropa a una nación, cuando el pecado es practicado por la mayoría de un pueblo, cuando los valores se han perdido, entonces ese pueblo va a una ruina y una destrucción eminente. En la Biblia nos dice que cuando las bases del justo son conmovidas, este no puede sostenerse. Cuando las bases sobre las cuales las personas justas se sostienen, son quitadas, cuando la bondad, las buenas costumbres, los rincipios, los valores, los mandamientos de Dios son removidas de una sociedad, entonces comienza la decadencia que trae destrucción.

Cuando el justo comienza a pasarse al bando del injusto, cuando hay menos personas que buscan a Dios, cuando hay menos personas que practican la bondad, entonces estamos en peligro verdadero. El justo debe seguir practicando la justicia y la leyes de un país deben ser fomentadas para protegerle ayudarle y promoverle, cuando se le persigue, se le acosa, su voz es callada, es un síntoma de una sociedad que no quiere oír la voz de alerta, la voz que puede salvarles.

Si eres justo sigue practicando al justicia y ahora con más fuerza, ante la amenaza de pecado, de maldad y de influencia de los que corrompen que parece que su voz es más fuerte, pero que al final esa voz es una voz que trae destrucción. Señor que nuestro corazón sea un corazón intercesor y lleno de amor, por aquellos que están en la oscuridad y que no dejemos de buscar la justicia del amor y la misericordia que nos lleva arrepentimiento y al perdón.




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