lunes, 22 de agosto de 2016

Que No Te Impulse La Necesidad De La Gente

No permitas que la necesidad de la gente motive tu vida, permite que sea El Espíritu Santo  quien te guíe.

La gente puede tener necesidades, pero las necesidades de otros no son ordenes de Dios.

El Rey Saúl quizo complacer a Su pueblo y cedió ante la presión de la gente. Dios le había dado una orden y prefirió complacer a la gente antes que a Dios. Así tengas que quedarte sólo, ir tu mismo a la guerra sin nadie que te respalde, pero nunca cedas a las exigencias de la gente cuando está no vayan de acuerdo a los mandamientos de Dios.

Muchos han cedido su integridad, sus principios, sus valores, han torcido la Palabra de Dios para alinearse a cosas que Dios aborrece, esas personas son unos cobardes, no poseen carácter, están lejos del Reino de Dios.

Hoy en día es fácil que la gente se venda. Es fácil que la gente claudique, es fácil que la gente se rinda. Pero dice la Biblia que la amistad con el mundo es enemistad para con Dios. Es preferible tener de amigo a Dios antes que al mundo.

Dios nos motiva a suplir la necesidades de las personas que están a nuestro alrededor, ayudarles y socorrerles, pero que al ayudarles a ellos no nos desviemos de sus ordenes, de sus Palabras.

Hay mucha gente que quiere es suplir sus necesidades inmediatas, pero no pueden ver sus necesidades eternas. Más importantes son las necesidades eternas. Lo que no muere es más importante que lo que muere, el Reino es más importante que el mundo.

Debes aprender a Decir NO.

La amabilidad te puede autodestruir.

La mayoría  gente se sienta mejor  con personas amables, que con alguien de carácter amargo o pendenciero. Sin embargo, hay personas que parecieran estar orgullosas de ser consideradas las de mejor corazón, las más amables y las que tienen “más amistades” debido a ser tan bondadosas.
La pregunta es: ¿se puede ser amable con todo mundo, en todas las situaciones? Hay gente que suele malinterpretar la prudencia y amabilidad, y abusan de “sus amistades” que son buena gente. Y hay también quienes siendo amables no pueden soportar un desaire.

Claro que se siente bien ser amable, pero tampoco se pueden dejar atrás los propios intereses para quedar bien con los demás. No puedes tratar de hacer feliz a los demás todo el tiempo, mientras tú mismo te sientes miserable.

Tu tienes un propósito de Dios y debes tomar en cuenta eso antes de permitir que las necesidades de otros desvien tu camino de las ordenes de Dios.

Dile No A La Gente


No te dejes manipular presionar o chantajear. Muchas personas que se aprovechan de los demás para conseguir sus propósitos, sin importarles lo que a otros les conviene. Encuentra el equilibrio al tomar la decisión de hacer lo que alguien más te pide que hagas por ellos.Tampoco hay por qué comportarse desconsideradamente, no hay nada hay de malo en qe te rehuses a hacer algo que no te conviene  hacer por los demás. Es bueno aprender a regirte por  lo mejor para tu propósito y ser capaz de decir "No" cada vez que haga falta.

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