viernes, 13 de septiembre de 2013

El Dios de la Risa


Génesis 18:12-14

(12)  Se rió, pues, Sara entre sí, diciendo: ¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi señor  ya viejo?

(13)  Entonces Jehová dijo a Abraham: ¿Por qué se ha reído Sara diciendo: ¿Será cierto que he de dar a luz siendo ya vieja?

(14)  ¿Hay para Dios alguna cosa difícil? Al tiempo señalado volveré a ti, y según el tiempo de la vida, Sara tendrá un hijo.

Dios nos hace reír, porque es Dios de alegría.

Dios le prometió a Sara un hijo y cumplió su promesa.

Gen 21:2

 

       Y Sara concibió  y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho.

 

No hay edad para la felicidad, hay una frase en mi país “nunca es tarde cuando a dicha es buena”. Abraham tenía cien años cuando nació su hijo Isaac. Sara expresó “Dios me ha hecho reír, y cualquiera que lo oiga se reirá conmigo”.

Dios quiere que entendamos que el quiere es la salvación del ser humano, su beneficio y bendición. Dios trajo bendición sobre cada uno de aquellos que le siguieron, la abundancia y prosperidad se manifestaron grandemente en ellos. Los profetas a pesar de tener una dura misión en sus tiempos gozaron del cuidado de Dios a través de una provisión sobrenatural y el poder concedido de Dios sobre los elementos, cosas, tiempos, enfermedades e incluso la muerte.

 
El que pueda entender lo que dijo Sara se reirá con ella de alegría y satisfacción. Dios hace que sonrías.

Dios te hará sonreír a ti, cumplirá las promesas que te ha dicho.

Dios te hará sonreír con bendiciones.

Dios te hará sonreír con abundancia.

Dios te hará sonreír cumpliendo el deseo de tu corazón.

Dios te hará sonreír con salvación.

Dios te hará sonreír con salud.

Dios te hará sonreír con gozo.

Dios te hará sonreír con alegría de corazón.

 
El secreto para sonreír con Dios: “cualquiera que lo oiga se reirá”, Quieres sonreír en esta vida llena de tantas amarguras, entonces oye a Dios. Escúchalo bien y cree en lo que te dice, cree en su palabra y ríete con Dios de las imposibilidades, del mundo y de las angustias y burlas.

¿Qué cosas están trayendo aflicción a tu vida?

¿Qué promesas estás esperando de Dios?

¿Está oyendo la Palabra de Dios con atención?

 

Oración: Señor, gracias te doy porque tu en medio de la aflicción me das una palabra y me prometes que todo estará mejor, hoy deposito mi confianza en ti, sabiendo que tu eres fiel para cumplir tu promesa, has que mi oído este presto para oír tu voz y mi animo este igual al tuyo para reírme antes las adversidades y circunstancias de la vida, en el nombre de Jesucristo amén.

 

 

 

 

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