«Bendito el hombre que confía en el Señor, y pone su confianza en él. Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme que llegue el calor, y sus hojas están siempre verdes. En época de sequía no se angustia, y nunca deja de dar fruto.»Jeremías 17:7-8.
Dios derrama las bendiciones sobre todos, a veces pensamos que Dios no abrirá las puertas de las bendiciones para nosotros debido a nuestros errores y desobediencia, pero Dios es misericordioso, y él está atento a cada una de sus criaturas. Dios quiere que volvamos a sus caminos y que le busquemos, él esta dispuesto a perdonar nuestras maldades y bendecirnos abundantemente. Él no es como nosotros que pagamos mal por mal. Él es un Dios de bondad ilimitada, así mismo son sus favores y misericordías. De su abundancia infinita, él puede bendecirnos en las situaciones más dificiles y hacernos abundar en los desiertos.
Cambiar nuestros pensamientos y acerca de Dios es primordial para poder percibir sus bendiciones y amor. No podemos recibir sus bendiciones si creemos que Dios no es bueno, o que Dios es un Dios castigador. No se puede beber el vaso de agua cuando pensamos que aquella persona que nos está dando el vaso quiere nuestro mal, pensaremos que tiene veneno. De igual forma si pensamos que Dios quiere nuestro mal, podremos tener delante de nosotros las más grandes oportunidades pero no las percibiremos como bendiciones de Dios.
Bendecimos lo que amamos. Aquellas personas que amamos, procuramos siempre bendecirlas, hacerlas sentir alegres y ver una sonrisa en sus rostros. De igual forma, Dios nos ama y él quiere que nosoros seamos felices y que disfrutemos de todo lo que el ha creado para nuestro beneficio. Dios es bueno en una manera ilimitada.
“El Señor te bendiga y te guarde; el Señor te mire con agrado y te extienda su amor; el Señor te muestre su favor y te conceda la paz.” Que te conceda lo que tu corazón desea; que haga que se cumplan todos tus planes. Pon en manos del Señor todas tus obras, y tus proyectos se cumplirán. Números 6:24-26, SAlmos 20:4, Proverbios 16:3
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